Empresas estatales de litio en América Latina: desafíos y oportunidades
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Los países de América Latina buscan fomentar el rol de las empresas estatales de litio, incluyendo su papel en la industrialización del litio. Equilibrar este objetivo con el de maximización de las ganancias fiscales del boom, definiendo mandatos claros y capaces de sobrevivir a los ciclos políticos, es fundamental para fomentar el rol estratégico de dichas empresas.
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Las empresas estatales de litio en América Latina se enfrentan a una serie de desafíos que abarcan aspectos económicos, geopolíticos, de gobernanza, sociales y ambientales, los cuales aún no han sido analizados exhaustivamente en la región.
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No se debe desaprovechar la capacidad de estas empresas de impulsar inversiones estratégicas. La articulación de sus objetivos con los de políticas nacionales de industrialización del litio que sean realistas puede ayudar a generar sinergias.
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El diseño de asociaciones público-privadas y proyectos conjuntos debe buscar un equilibrio entre el nivel de control estatal y la gestión del riesgo, y basarse en diseños que ayuden a alcanzar objetivos estratégicos para mejorar la gobernanza del sector. Es importante además definir mecanismos transparentes para la selección de socios.
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Los países de América Latina cuentan con una oportunidad geopolítica para la promoción de relaciones comerciales favorables en el sector del litio. No obstante, se debe mitigar el riesgo de dar tratos preferenciales a las empresas estatales para acelerar la atracción de inversiones y la producción, sin mejoras en sus estándares de gobernanza ambiental y social.
En América Latina, donde se concentra la mayor parte de los recursos de litio identificados en el mundo (56 %), las empresas estatales están cobrando una nueva relevancia. Mientras que, en la década de 2010, solo Bolivia y Argentina contaban con empresas estatales de litio, en 2022, México creó LitioMx y Chile está discutiendo un proyecto similar.
Algunos analistas han descrito este auge como símbolo de una nueva ola de nacionalizaciones en la región. Esta interpretación, sin embargo, no ha alcanzado consenso debido a la complejidad de los enfoques que se están adoptando, los cuales involucran estructuras de propiedad mixta y colaboración público-privada. Pese a esto, es innegable que el rol de las empresas estatales de litio está cambiando, y se espera que desempeñen un papel más central, sobre todo para potenciar la industrialización del litio, fomentando el desarrollo doméstico de su cadena de valor.
La situación económica que atraviesan los países de la región, con fuertes presiones inflacionarias y agravamiento de problemas estructurales como baja productividad, frágil capacidad institucional y déficits presupuestarios, ha generado altas expectativas sobre la capacidad de la industria del litio y las empresas estatales para maximizar las ganancias del boom de precios.
El diseño de políticas para mejorar la gobernanza de las empresas estatales de litio en la región se encuentra con frecuencia entrampado en debates polarizados sobre la justificación de la existencia de estas empresas y su grado de control en la propiedad. Se requiere de una conversación más profunda sobre cómo potenciar su papel para orientar el diseño de mejores políticas que fomenten su competitividad, su rol en la industrialización del litio y sus estándares ambientales, sociales y de gobernanza.
Con el propósito de fomentar y enriquecer este debate, así como informar a organizaciones de la sociedad civil, representantes de gobierno y otros tomadores de decisiones, este documento sistematiza desafíos y oportunidades que enfrentan las empresas estatales que participan en la cadena de valor del litio en la región. Este estudio recoge y complementa el trabajo de NRGI en relación con la gobernanza del litio en América Latina, sobre todo en México y Chile.
Authors
Andrea Furnaro
Senior Policy Analyst
Susannah Fitzgerald
Governance Officer